Hermosillo, SONORA.- Para exigir que los diputados locales intercedan en el cumplimiento de los compromisos del Gobierno Federal, pobladores del municipio de Ures, afectados por el derrame tóxico en el Río Sonora se manifestaron en el Congreso del Estado esta mañana.

Uno de los asistentes a la protesta externó que a la fecha siguen pendientes tres puntos claves:  la construcción de 36 plantas potabilizadoras, una auditoría a los recursos del fideicomiso de 2 mil millones de pesos y la construcción de un hospital para la atención médica de los afectados.

Con cinco años transcurridos desde el derrame más severo que ha tenido el país, los pobladores de las comunidades por donde pasa el Río Sonora y Bacanuchi exigen tener conocimiento del fideicomiso de mil 200 millones que se destinó a las familias afectadas. 

Y es que el fideicomiso Río Sonora creado para efectuar las acciones del Programa de Remediación, el pasado 7 de febrero de 2017, fue de un total de 2 mil millones de pesos, de los cuales mil 200 millones se entregaron y 800 quedaron sin ejercer, no obstante, los pobladores no saben cómo se destinaron esos mil 200 millones; lo cual les ha impedido restablecer la economía, además de que en los últimos dos años se han incrementado los casos de cáncer, padecimientos en la piel y enfermedades gastrointestinales, señalaron.

También miembros de la comunidad del Sauz expusieron que en los últimos años se han presentado cinco casos de cáncer a consecuencia de la contaminación del Río Sonora, de esta forma uno de los habitantes que acudió al Congreso del Estado el día de hoy entregó un escrito a los diputados para que den solución a esta problemática.