Navojoa, SONORA.- Juan Cruz Jusacamea Mendoza es un estudiante que camina cerca de tres horas para llegar al Colegio de Bachilleres ubicado en San Ignacio en Navojoa, pero la institución planea cerrar por falta de recursos lo que dejaría a él y varios estudiantes más sin clases.

Como Juan, otros jóvenes asisten a la escuela sin tener dinero, a veces ni para comer; ya que como es su caso trabaja cortando sábila para subsistir porque su padre se encuentra en cama por una herida y perdió a su madre cuando estaba pequeño.

Pero también otros estudiantes se quedaría sin oportunidad de estudiar si las autoridades educativas deciden cerrar el Cobach San Ignacio, porque no es una opción trasladarse a otro lugar, pues en ocasiones ni siquiera tienen dinero para comer, menos para los camiones.

Los alumnos de bajos recursos de las comunidades de San Ignacio comentaron sus esfuerzos para ir a la preparatoria y sus deseos por que las autoridades los escuchen, ante el cierre del plantel por rezago presupuestal.

Por ello hay incertidumbre y miedo por la situación que afectará principalmente a alumnos de las comunidades aledañas que tienen dificultades para trasladarse.

Otro estudiante del mismo plantel platicó que no tiene comodidades, como computadora o internet, menos algo en qué trasladarse, pero lo que sí tiene ganas es de estudiar.

Los docentes del Cobach San Ignacio indicaron que los jóvenes actualmente tienen promedios académicos superiores a 8.5 y luchan por salir adelante, por lo que su única opción es el Cobach de esta comunidad.