El Sol de Hermosillo
Uno de los grandes pendientes que se tiene por parte del estado mexicano a través del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) es que después de 16 años no ha querido reconocer la condición de menores lesionados como consecuencia del incendio de la Guardería ABC, declaró Gabriel Alvarado Serrano.
El abogado y representante legal del colectivo Manos Unidas, así como de Salud y Justicia, señaló que no obstante que la gran mayoría de las niñas y niños, ahora jóvenes afectados, cuentan con un dictamen médico elaborado por el propio IMSS, su actual director, Zoé Robledo Aburto sistemáticamente se ha rehusado y negado a reconocerles ese carácter.
Explicó que con esto, el actual director de la institución de salud pública ha privado a los principales afectados de todos los derechos y apoyos que se contemplan tanto en los decretos presidenciales que se han elaborado en ese sentido, así como en diversos acuerdos del consejo técnico del IMSS.
“Los ha privado de esa posibilidad, a 16 años del hecho, y ese es uno de los grandes pendientes o rezagos que tiene el estado mexicano, en lugar de volcarse y brindar toda clase de asistencia médica y de todo tipo a un menor que vivió y sufrió bajo esas características”.

Dio a conocer que un total de 35 menores afectados son los que actualmente se encuentran pendientes en esta situación bajo el argumento de la autoridad de que no se puede reconocer el dictamen médico, dado que éste se elaboró por el Área de Salud en el Trabajo del IMSS y los afectados no son trabajadores.
Explicó que esto se determinó así por la misma cúpula del Seguro Social, ya que al ser este un hecho inédito no existía para ellos un mecanismo legal de cómo poder trazar esas afectaciones y lesiones, por lo que se hizo en los términos de la Ley Federal del Trabajo.
“Ese argumento no tiene nada que ver pues desde un principio la misma cúpula del Seguro Social determinó que las lesiones en términos legales fueran determinadas por el Área de Salud en el Trabajo en términos de la Ley Federal del Trabajo”.

Denunció que, aunque esta es la situación actual, por parte del IMSS no se ha propuesto ninguna otra solución al respecto, buscando que los afectados se sometan a estudios una y otra vez, los cuales resultan ser invasivos en muchos de los casos.
Para finalizar, el jurista agregó que a pesar de ya haber dado positivo en muchas ocasiones a los estudios realizados por el IMSS, estos parecen insuficientes, por lo que pareciera que la resistencia a reconocer a los afectados le da un tinte de índole personal a la situación.