Agencia EFE
El Gobierno de Ecuador confirmó este jueves la liberación de una familia ecuatoriana que se encontraba secuestrada en México, después de haber realizado gestiones con autoridades mexicanas y delegaciones consulares para lograr su ubicación.
Actualmente la familia se encuentra bajo custodia de la Fiscalía mexicana, según informó el Ministerio de Relaciones Exteriores y Movilidad Humana en un comunicado.
La Cancillería ecuatoriana, a través de sus unidades y oficinas consulares, se encuentra en contacto con los familiares de los compatriotas.
La localización de la familia se gestionó con la Unidad Antisecuestros y la Fiscalía de Chihuahua, mediante el consulado de Ecuador en Phoenix (Estados Unidos).
El Ejecutivo ecuatoriano, en colaboración con la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), ofrecerá la opción de retorno asistido al Ecuador.
Si finalmente la familia decide retornar a Ecuador, la Cancillería aplicará el protocolo de atención a personas ecuatorianas en situación de vulnerabilidad y los procedimientos correspondientes para facilitar el retorno.
En los últimos años se han vuelto frecuentes los casos de migrantes irregulares que buscan llegar a Estados Unidos y que resultan secuestrados o retenidos por las mafias de tráfico de personas, quienes les exigen dinero adicional al que ya les han pagado para tramitarles documentos o para permitirles seguir el viaje.
Actualmente, Ecuador no dispone de consulados propios en México para asistir a sus compatriotas, después de que en abril México rompiese las relaciones diplomáticas tras la irrupción violenta de la Policía a la Embajada mexicana en Quito, para detener a Jorge Glas, un exvicepresidente del Gobierno de Rafael Correa (2007-2017) y de inicios del de Lenín Moreno (2017-2021).
Antes de que un juez ordenase su captura, Glas se había refugiado en diciembre de 2023 en la sede diplomática mexicana y al momento de su detención gozaba ya del asilo diplomático concedido por el Gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador, y esperaba la extensión de un salvoconducto que le permitiera abandonar el país.
El exvicepresidente actualmente guarda prisión en La Roca, la cárcel de máxima seguridad de Ecuador, situada en la ciudad costera de Guayaquil, mientras los Gobiernos de Ecuador y México mantienen un litigio en la Corte Internacional de Justicia (CIJ).