Hermosillo, SONORA.- En la actualidad, el parque recreativo La Sauceda se encuentra desolado, a pesar de que el Gobierno del Estado paga guardias de seguridad y realiza obras de mantenimiento y limpieza de vez en cuando. Y es que los esfuerzos por rescatarlo en años recientes han sido en vano.
La Burbuja Museo del Niño y el humedal laguna La Sauceda son los únicos espacios en operación que producen actividad recreativa, pero unos metros después de terminarse la zona de juegos de la Burbuja, todo se vuelve maleza y abandono.
El zacate seco y que ha crecido a voluntad, así como los restos de árboles y palapas quemadas por los múltiples incendios que han ocurrido en el lugar muestran el verdadero rostro de un área recreativa que se quedó en el olvido.
Debemos recordar que en sus años de esplendor, La Sauceda tenía un río lento, un chapoteadero, una alberca de olas y hasta una casa del terror que comprendía el Aquafantástico y a donde las familias asistían para pasar momentos agradables.
Estas atracciones se convirtieron en cascarones desiertos con la pintura descarapelada, accesos rotos y agua estancada lo que pudiera ser un riesgo para la salud por la cría de dengue, zika y chikungunya.
Con información de El Imparcial
