Ciudad de México.- El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, busca que el Tren Maya sea la obra de infraestructura que defina a su gobierno, junto con el aeropuerto de Santa Lucía. Sin embargo, en el caso del tren, se ha tenido todo tipo de polémicas que apuntan a que no sólo afectará el ecosistema de la región, sino que será más caro de que lo pensábamos y además, a la larga, representará un aumento en las emisiones de contaminantes.
Como parte de esto último, hoy se ha revelado que el Tren Maya no será eléctrico, como se había propuesto, sino que usará diésel. Pero lo peor de todo es que el combustible será importado, ya que Pemex no tiene la capacidad para producir suficiente diésel y menos del llamado de Ultra Bajo Contenido de Azufre (UBA), ni contemplando la futura refinería de Dos Bocas. En resumen, el Tren Maya tendrá que operar con combustible comprado en el extranjero.
Sigue habiendo cambios en el proyecto original del Tren Maya
De acuerdo al análisis costo-beneficio del Tren Maya por parte del Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur), se presenta una comparación entre los costos de un tren a diésel contra uno eléctrico, y aquí se concluye “que el proyecto planteado sobre la base del diésel es menos costosa que el eléctrico en términos de Costo Anual Equivalente (CAE)”.
“El CAE de la alternativa eléctrica es 6.8% mayor a la alternativa del diésel. Además de que la alternativa de tracción eléctrica requeriría de estudios detallados para asegurar la viabilidad para la conexión de los centros de carga, donde se señalan las posibilidades restricciones y obras que se requieren para mantener la confiabilidad del Sistema Eléctrico Nacional, ante el Cenace, lo cual puede generar retrasos.”
Hay que señalar que no se especifica nada acerca del volumen de combustible diésel que requiera la operación habitual del Tren Maya. Por lo que no está claro sobre que base se asegura que el eléctrico es más costoso.
El pasado 1 de junio, tras el inicio de la obra, el presidente López Obrador aseguró que el Tren Maya se inaugurará en 2023 con cinco tramos: Palenque, Campeche, Yucatán, Cancún y Tulum. Ya para 2024 se contempla añadir dos tramos más: Tulum – Carrillo Puerto – Escárcega.

También se señaló que la compañía que gane la concesión para la operación del Tren Maya podrá adquirir diésel ya sea a Pemex o compañías privadas. Pero el problema aquí es que Pemex no cuenta actualmente con la capacidad de extracción y producción de diésel para una obra de este calibre.
De acuerdo a los datos del primer cuatrimestre de Pemex, sólo han logrado cubrir el 52% de la demanda de hidrocarburos del país. Esto ha llevado a que se tenga que importar combustible de China, Estados Unidos y Japón.
Pero eso no es todo, se esperaba que Pemex pudiera ofrecer el llamado “diésel limpio” o UBA en 2019, sin embargo esto no fue así. Y es que la Secretaria de Energía, Rocio Nahle, extendió este plazo hasta el 1 de enero de 2025, ya que actualmente no fue posible cumplir con la norma NOM-016-CRE-2016 de calidad de los petrolíferos, que pide que el diésel tenga al menos 15 miligramos de azufre por kilo.
Con información de Xataka.com.mx