El Debate
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, declaró una emergencia nacional en Washington D.C. y ordenó la federalización de la ciudad tras un enfrentamiento con la alcaldesa Muriel Bowser, quien anunció que la policía local no colaborará con el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE).
La decisión presidencial implica el despliegue de más de dos mil agentes federales en la capital del país, en medio de un debate sobre el papel de las autoridades locales frente a la política migratoria federal.
“Voy a llamar a una emergencia nacional. En solo unas semanas. El ‘lugar’ está absolutamente en auge… por primera vez en décadas, prácticamente NO HAY CRIMEN”, aseguró Donald Trump.
El origen del conflicto radica en el acceso a la información sobre personas en situación migratoria irregular. Mientras la administración de Trump sostiene que la coordinación con ICE es indispensable para reducir la delincuencia, la alcaldesa Bowser y otros líderes locales argumentan que el involucramiento de la policía capitalina en asuntos migratorios genera desconfianza entre los residentes y debilita la seguridad comunitaria.
Al justificar la emergencia, Trump aseguró que la negativa de cooperación representa un riesgo directo para el orden público y acusó a sus adversarios políticos de obstaculizar la estrategia federal.
Para el mandatario, la reducción en los índices de criminalidad registrada en las últimas semanas en Washington es resultado de la presencia de fuerzas federales, por lo que advirtió que cualquier ruptura con ICE podría revertir esos avances.
Si la policía deja de cooperar con el ICE, el crimen volverá rugiendo, advirtió.
Trump llamó a los habitantes de la ciudad a que confíen en él: “A la gente y a los negocios de Washington, D.C., No se preocupen, yo estoy con ustedes y no permitiré que esto ocurra. ¡Voy a llamar a una emergencia nacional, y federalizar, si es necesario!!!”, agregó.