El Debate
Gavin Williams estuvo a tan solo dos outs de inscribirse en la historia de los Guardianes de Cleveland con el primer juego sin hits del equipo en 44 años, pero el sueño se desvaneció en la novena entrada tras un cuadrangular solitario de Juan Soto que silenció momentáneamente el Progressive Field. Aun así, Cleveland completó la barrida de tres juegos sobre unos Mets de Nueva York que atraviesan una profunda crisis, imponiéndose 4-1 este miércoles.
Williams, que venía lanzando con una autoridad impresionante, había dominado a la ofensiva de los Mets durante ocho entradas completas. Abrió la novena ponchando al puertorriqueño Francisco Lindor, pero dos lanzamientos más tarde, Soto conectó una recta que superó por centímetros el salto del jardinero central Ángel Martínez. Así se esfumó la ilusión de romper con la sequía más larga de juegos sin hits en las Grandes Ligas: Cleveland no logra uno desde el juego perfecto de Len Barker en 1981.
El joven lanzador derecho trabajó 8.2 entradas, permitiendo solo un hit, tres boletos y recetando seis ponches. Su actuación alcanzó los 126 lanzamientos, la cifra más alta en lo que va de temporada en Grandes Ligas, superando su propio récord personal por 17 lanzamientos. Tras otorgar otra base por bolas a Brandon Nimmo, fue relevado por Hunter Gaddis, quien dominó a Mark Vientos con un elevado para sellar el segundo salvamento de su carrera.
Ofensivamente, Cleveland hizo lo suficiente para respaldar la joya de su abridor. David Fry abrió el marcador con un jonrón solitario en la segunda entrada ante David Peterson, mientras que el dominicano Ángel Martínez amplió la ventaja con un cuadrangular de dos carreras en el tercer episodio. Gabriel Arias cerró la cuenta con un triple productor en la sexta.
Por los Guardianes, destacaron los latinos: José Ramírez se fue de 4-1, Ángel Martínez de 4-1 con una anotada y dos producidas, y el venezolano Arias de 4-1 con una remolcada. Por los Mets, el único destello fue el batazo de Soto, que se fue de 4-1 con una anotada y una impulsada. Lindor tuvo una noche para el olvido al irse de 4-0.
