EL SOL DE HERMOSILLO
Está prohibido fumar en parques, playas, estadios y espacios públicos, pero activistas consideran que que no se aplica la ley como debiera de ser.
Es necesario que las instituciones públicas responsables de que se aplique la ley de Protección Ciudadana contra los Efectos Nocivos del Tabaco sean más rigurosas en su actuar, a fin de que se cumplan sus especificaciones de no fumar en parques, áreas públicas y playas.
De acuerdo con declaraciones de la representante del Colectivo Ambientalista Cultura Verde, Pamela Ibarra Dávila, recordó que desde hace dos años está prohibido fumar en parques, estadios, y playas, sin embargo, hace falta mayor rigurosidad.
Indicó que la legislación prohíbe expresamente fumar en sitios como playas, parques, estadios y otras áreas de convivencia, sin embargo, la falta de vigilancia ha provocado que esta medida se pase por alto con frecuencia.
“Se necesita mayor firmeza por parte de las autoridades responsables, porque de nada sirve tener una ley si no se aplica”, enfatizó.
En ese sentido, explicó que tanto la Comisión de Ecología y Desarrollo Sustentable del Estado de Sonora, como la Procuraduría Ambiental del Estado, son las dependencias encargadas de hacer valer la norma, y una de sus funciones debe ser también la instalación de señalética clara que advierta la prohibición.
Ibarra Dávila lamentó que, pese a tener una ley en vigor, muchos ciudadanos siguen fumando en lugares públicos, lo cual no sólo representa un riesgo para la salud, sino también un problema ambiental grave.
Alertó que una sola colilla puede contaminar hasta 50 litros de agua, además de que tarda hasta 12 años en descomponerse.

“Son desechos muy contaminantes, la gente no lo sabe, por eso es clave que se refuerce la difusión de esta información”, puntualizó.
Entre las sustancias que contienen estos residuos se encuentran el plomo, arsénico y nicotina, elementos altamente tóxicos que se filtran en el agua y afectan la vida marina, sobre todo en zonas costeras donde la presencia de fumadores en la playa aún es común.
Precisó que, entre las sustancias que contienen las colillas, generan una contaminación en los mares, sobre todo cuando hay personas que tienen el hábito de fumar en las playas y tiran la colilla al mar.